María Elena (Manena) Naveillan y Lourdes Naveilla son hermanas, artistas y miembros de la Comunidad Antenna desde hace dos años. Ambas realizan una investigación en torno a sus antepasados y exploran, cada una desde su obra y estilo personal, las conexiones familiares con Francia.
Su práctica artística entrelaza materia, memoria y símbolos. Mientras Lourdes indaga en el lenguaje del color y la huella en pintura, escultura y grabado, Manena centra su obra en el papel, los símbolos y en cómo estos se relacionan a través de los medios de comunicación y los hallazgos de culturas milenarias, generando un intercambio entre lo ancestral y lo contemporáneo.
El año 2022 marcó un nuevo rumbo en su trabajo. En el contexto de una residencia artística realizada en Centro Lizières –espacio cultural interdisciplinario dirigido por el artista Ramuntcho Matta desde 2009, dedicado a talleres y seminarios sobre prácticas de cuerpo y mente, ubicado en medio del bosque, a una hora de París–, Manena y Lourdes se enfrentaron a la pregunta: ¿Quién eres tú y qué es lo mejor que puedes sacar de ti?. Durante los diez días de residencia, compartieron procesos con artistas de Chile y de otras partes del mundo. Allí se les pidió desarrollar una obra in situ con materiales entregados por el propio entorno natural, piezas que luego pasan a formar parte del lugar de manera indefinida.
En el caso de Manena, su obra se inspiró en el apego y el concepto de ascensión: estudió las lianas y raíces que brotan de los árboles, creando una intervención en un parrón del château que evocaba un altar. En él integró las letras caladas características de su escultura, invitando a los visitantes tanto a contemplar cómo a jugar y armar sus propios nombres.
Para Lourdes, la experiencia estuvo marcada por la pérdida de su maleta, donde llevaba consigo una idea preconcebida de lo que quería desarrollar. Ese contratiempo la obligó a comenzar desde cero y a conectarse más profundamente con el bosque y las hojas caídas de los árboles. Recordando que su nombre proviene de la ciudad de Lourdes (Francia), un sitio de peregrinación, decidió escribirlo sobre la tierra utilizando hojas del entorno. Ese gesto performático la impulsó a iniciar el proceso de recuperar su nacionalidad francesa y a someterse a un examen de ADN.
Ambas hermanas han compartido su labor artística desde pequeñas. En sus propias palabras:
“No competimos: tenernos al lado significa que podemos darnos un feedback desde la verdad. Venimos de una familia atípica, donde seis hermanos pudimos desarrollarnos libremente en lo que nos apasionaba, fuese el arte o los negocios, siempre con el apoyo incondicional de nuestros padres.”
Su historia familiar está ligada a su abuela paterna, Silvia Fernández Zegers de Naveillan, poeta y autora del libro La Familia Zegers de Chile. A través de ella, María Elena ha desarrollado una conexión con la escritura, creando obras que transmiten la importancia del lenguaje para el desarrollo humano. En la construcción de esas piezas —letras suspendidas en hilos invisibles— ha compartido con Lourdes el significado de anudar: los lazos familiares.
En 2026, ambas artistas viajarán a Francia para profundizar y dar inicio a este proyecto colaborativo con el que esperan desarrollar una exposición instalativa donde las personas puedan adentrarse en su obra.
Nos emociona acompañar a Manena y Lourdes en esta etapa, y saber que el 2026 abrirá nuevas posibilidades para su trabajo conjunto en Francia. Esperamos con entusiasmo ver cómo esta experiencia se transforma en futuras exposiciones.
Puedes conocer más sobre la obra de ambas artistas en sus respectivas cuentas de Instagram:
https://www.instagram.com/manenanaveillanart
https://www.instagram.com/lourdesnaveillanart
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